Descripción
Totem Zen de Djeco es un juego de habilidad en el que tienes que ser el más rápido en conseguir las piezas y después construir el totem. Gana el que consiga 20 puntos.
Instrucciones:
- Se colocan las piezas de madera en la caja del juego, a la misma distancia de todos los jugadores. Cada jugador recibe un par de varillas (más un sujetavarillas, si lo desea) y un jardín. Se barajan las 24 cartas y se ponen boca abajo sobre la mesa.
- El más joven le da la vuelta a una carta en la que aparece un tótem de entre 3 y 7 puntos. Todos los jugadores juegan al mismo tiempo. Deben recuperar las piezas de madera indicadas en la carta con la ayuda
de sus varillas y colocarlas en sus jardines. - A continuación, lo más rápido posible y sin varillas, los jugadores componen el mismo tótem que se muestra en la carta.
- Todas las piezas colocadas fuera del jardín pueden ser cogidas por otro jugador, pero solo con la ayuda de las varillas.
- El primer jugador que termina su tótem grita “Totem Zen”. Los demás jugadores se detienen y comprueban la exactitud del tótem del ganador:
- Si el tótem es correcto, el jugador se queda con la carta y gana el número de puntos correspondiente;
- si el tótem es incorrecto (color, forma u orden de las piezas), el jugador renuncia a la carta más alta que haya ganado anteriormente.
Fin de la partida: la partida se termina cuando un jugador consigue al menos 20 puntos.
Contenido: 26 cartas, 4 jardines (bases circulares de cartón), 4 pares de palillos, 4 sujetapalillos y 64 piezas de madera.
Número de jugadores: 2 a 4
Recomendado a partir de 6 años. (No veo problema antes de esta edad utilizando solo las tarjetas más sencillas)
Véronique Michel-Dalès creó Djeco en 1954, una época en la que pocas mujeres se lanzaban a emprender este tipo de aventuras. Creó juegos de aprendizaje bonitos, inteligentes y lúdicos a la vez, los juegos Djeco, en referencia al gecko, el pequeño lagarto de la suerte, tienen muchísimo éxito y en los años sesenta son recompensados con premios Óscar al mejor juguete. Luego su hijo en 1997, dotado de una sensibilidad artística poco común en el universo de los juguetes, inventa una colección de juegos educativos. Primero, comienza con rompecabezas, juguetes de madera, rompecabezas de cartón y más adelante, amplía las gamas con juegos de cartas y juegos de sociedad.
Sus juguetes son sometidos a pruebas largas y complejas, cumpliendo con las exigencias de la norma europea EN71 y el reglamento REACH. La marca «CE» inscrita sobre los envases indica que el producto cumple con las normas.